jueves, 8 de agosto de 2013

El Sábado - Parte 4, Nehemías 9:13,14

Después de muchos años de cautiverio, el pueblo de Dios se encuentra en un proceso de reintegración geográfica, social y religiosa.  En esta ocasión, se encuentran celebrando una ceremonia de confesión que contrasta con la previa fiesta de los tabernáculos rodeada de alegría.  Ahora, se siguen ritos que llevan a la oración de confesión que ofrecerán los levitas, quienes dirigen el servicio de adoración.

A lo largo de la oración pública, se hace referencia a la historia de altibajos en la relación de Israel con Dios, incluyendo la experiencia en el Sinaí: "Y sobre el monte de Sinaí descendiste, y hablaste con ellos desde el cielo, y les diste juicios rectos, leyes verdaderas, y estatutos y mandamientos buenos" (v13).  Notemos que el pueblo es recordado que los Diez Mandamientos fueron dados verbalmente por boca de Dios, sin intermediarios. El versículo 14, hace referencia al resto de las leyes: "...y por mano de Moisés tu siervo les prescribiste mandamientos, estatutos y la ley."

Si te das cuenta, Dios dio dos conjuntos de leyes, estatutos, y mandamientos; un conjunto en forma personal, desde el cielo (v13), y otro conjunto a través de Moisés (v14) haciendo clara distinción entre los Diez Mandamientos y el resto de las leyes dadas a través de Moisés, idea confirmada al recibir ambas leyes un trato diferente una de la otra.  Mientras los Diez Mandamientos estaban dentro del arca (Dauteronomio 10:5; 1 Reyes 8:9), la ley dada a través de Moisés estaba a un lado del arca (Deuteronomio 31.26).

En medio de los dos sets de leyes, estatutos y mandamientos, y asociado con lo que Dios habló desde el cielo encontramos la siguiente declaración: "y les ordenaste el día de reposo santo para ti," refiriéndose al día sábado.

Si te das cuenta, el día sábado es 1) asociado con la ley dada directamente y verbalmente por Dios, y 2) justifica su observancia por el acto de Dios de santificarlo en Génesis 2:3, proyectando su origen a la creación, distinguiéndolo por encima de cualquier etnia, cultura o religión.

El siguiente texto será Isaías 58:13,14

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